Cerca del Monasterio de los Jerónimos encontraremos el Museo de Carruajes (Museu Nacional dos Coches), sin duda uno de los museos más curiosos que podemos visitar en Lisboa. Desde mayo de 2015 reparte su colección entre dos edificios, uno situado en un lugar histórico, el antiguo picadeiro real, y otro de diseño moderno, el Novo Museu dos Coches, junto a los jardines de Belem.
Entre ambos albergan una gran colección de carruajes y carrozas antiguas, y de hecho el museo está considerado el mejor del mundo de este tipo, pues contiene decenas de piezas que datan de entre los siglos XVII y XIX.
¡Encuentra rápido lo que buscas!
La historia del primer museo de carruajes de Portugal
El edificio que hoy alberga el primer Museo de Carruajes era el antiguo picadero real, en cuya planta baja se celebraban los campeonatos de equitación que la familia real disfrutaba desde las balconadas superiores.
A comienzos del siglo XX, la reina Amélia de Orleans decidió reconvertirlo en un museo que alojase la gran colección de carrozas y carruajes que la familia real portuguesa había ido atesorando a lo largo de su historia. En 1905 abrió sus puertas al público por primera vez, y actualmente es el museo más visitado de Lisboa.
Las piezas más importantes del Museo Nacional dos Coches
Aunque todos los carruajes del museo son muy interesantes, hay unos cuantos que destacan por su antigüedad o por su papel en la vida política de su época. Entre ellos, las tres carrozas que pertenecieron al Papa Clemente XI, la carroza de la boda real de João V y María Ana de Austria o la de Felipe III, la más antigua del museo.
Llama especialmente la atención uno de los carruajes, el dedicado a la troca de princesas, cuya función era transportar hasta la frontera a las infantas y a los representantes diplomáticos españoles y portugueses que las intercambiaban para establecer alianzas entre ambos reinos mediante su casamiento.
El recorrido por el museo nos permitirá conocer la evolución del transporte a lo largo de estos tres siglos y también las diferentes corrientes estilísticas que se han ido sucediendo y que podemos apreciar observando la decoración de los carruajes.
El antiguo Museo de los Carruajes consta solo de dos plantas diáfanas: en la planta baja están expuestos algunos los carruajes y en la planta superior algunos retratos y otros objetos curiosos que también forman parte de esta gran colección, como los carritos de bebé o las antiguas literas de paseo.
El nuevo Museo de Carruajes (Novo Museu Nacional dos Coches)
A finales de mayo de 2015 fue inaugurado este nuevo edificio perteneciente al Museo de los Carruajes de Lisboa, con motivo del 110 aniversario de la inauguración del primer museo.
Aunque el proyecto aún no está del todo concluido, ya puede visitarse este nuevo museo, donde también podremos contemplar varios carruajes históricos que han sido traídos aquí desde el antiguo museo, además de otros elementos relacionados con el transporte y su historia.
La visita merece la pena, pues tenéis ambos museos a unos minutos a pie del Monasterio de los Jerónimos y no se tarda más de una hora en recorrerlos yendo a buen ritmo.