A los pies de la desembocadura del Tajo se extiende el barrio de Belém, recuerdo permanente de aquella Edad de Oro donde las naves portuguesas partían en busca de nuevos descubrimientos. Es una visita obligada si estás en Lisboa, pues en él se encuentran algunos de los museos más interesantes, como el Museo de la Electricidad o el Museo Nacional de Carruajes, y algunos monumentos Patrimonio de la Humanidad, como el impresionante Monasterio de los Jerónimos, construido por Manuel I en el siglo XVI honor a los viajes a la India de Vasco de Gama, o la emblemática Torre de Belém, el símbolo más reconocible de la ciudad.
¿La forma más completa de descubrir Belém?
¡Nuestra visita guiada en Belem con paseo en barco!
Aunque no es un barrio céntrico, podemos llegar a Belém fácilmente en el tranvía 15 de Lisboa o en el autobús 728 y comenzar nuestro recorrido (mejor cuanto más temprano) en el Monasterio de los Jerónimos; tras visitar su hermoso claustro, podemos hacer una parada en la Antiga Confeitaria de Belém, que se encuentra a apenas 300 metros y donde podremos probar los famosos pasteles de Belém siguiendo la antigua (y según afirman, auténtica) receta.
A continuación volver a cruzar al lado del Tajo para dirigir nuestros pasos hacia el Monumento a los Descubrimientos, enorme monolito con forma de carabela levantado para conmemorar los 500 años desde la muerte de Enrique el Navegante; junto a éste podemos contemplar también las esculturas de otros exploradores y personajes célebres de Portugal. Recomendamos subir al mirador para disfrutar de una estupenda panorámica con vistas del Tajo, del Puente 25 de Abril y del Monasterio de los Jerónimos.
Siguiendo nuestro paseo junto al río llegaremos hacia la vieja fortaleza de la Torre de Belém, erigida para controlar el paso la entrada al puerto por el Tajo, donde podremos visitar desde sus calabozos hasta subir lo más alto de la torre.
Si avanzamos a partir de aquí siguiendo el río, podemos coger un ferry hasta Trafaria; además de descansar durante un agradable viaje por el Tajo, en apenas media hora llegaremos a esta pequeña localidad pesquera donde podremos concluir nuestra visita reponiendo fuerzas en alguno de sus acogedores restaurantes, que sirven pescado fresco capturado en el día.
Qué ver en el barrio de Belem
- Monasterio de los Jerónimos
- Torre de Belem
- Monumento a los Descubrimientos
- Antiga Confeitaria de Belem
- Museo Nacional de Carruajes
- Puente 25 de Abril
- Cristo Rey
- Museo Berardo
- Museo de la Electricidad
- MAAT (Museo de Arte, Arquitectura y Tecnología)
- Museo de Oriente
- Museo Nacional de Arqueología
- Planetario Calouste Gulbenkian