Esta es nuestra selección de los mejores museos de Lisboa. Aquí os resumimos a qué están dedicados, horarios y precios, pero para ampliar información sobre cada uno de ellos, averiguar qué ver y cómo llegar, podéis seguir los enlaces del título, que os llevarán a su ficha completa.
Lisboa es una ciudad con una amplia y variada oferta museística: muchos de ellos son completamente gratuitos o pueden visitarse gratis en determinados días y horarios. En numerosos museos, además, la entrada está incluida en la Lisboa Card (no olvidéis echar un vistazo al apartado de Lisboa Card en «precio» para saber qué museos incluye y cuáles no).
¡Encuentra rápido lo que buscas!
Museo del Fado (Museu do Fado)
Un espacio muy interesante dedicado a la historia del fado, desde su nacimiento en el barrio popular de Alfama hasta su internacionalización de la mano de fadistas de la talla de Amália Rodrigues.
Museo de Oriente (Museu do Oriente)
Santuario de la cultura asiática, el Museo de Oriente es uno de los más jóvenes e interesantes de Lisboa y os recomendamos que no os lo perdáis. Su colección atestigua los vínculos comerciales y culturales de los portugueses con Asia, incluyendo piezas tan sobrenaturales como las esculturas de espíritus birmanas de la primera planta.
Museo Nacional de Arqueología (Museu Nacional de Arqueologia)
Dentro del Monasterio de los Jerónimos se encuentra el Museo Nacional de Arqueología, donde destaca especialmente la colección dedicada al culto romano. Un recorrido por el pasado que no te puedes perder en tu visita a la ciudad.
Museo Nacional del Azulejo (Museu Nacional do Azulejo)
Sobre un antiguo convento del XVI se levanta este museo dedicado a uno de los elementos más representativos de Lisboa: el azulejo. Aquí podremos verlos de todas las épocas, formas y procedencias. La pieza estrella, un panel de 36 metros de largo representando la ciudad. Muy interesante también el claustro, de estilo manuelino.
Museo Calouste Gulbenkian (Museu Calouste Gulbenkian)
En 1969 se inauguró el Museo Calouste Gulbenkian, gracias al patrocinio de este ingeniero amante del arte que a su fallecimiento donó a Portugal su colección privada, compuesta por más de 6.000 piezas de arte antiguo y moderno. Destacan el Beso de Primavera de Rodin y el Retrato de un anciano de Rembrandt.
Museo de Carruajes (Museu Nacional dos Coches)
Ubicado en el antiguo picadero del Palacio de Belém, es uno de los museos más curiosos y visitados de Lisboa; alberga carruajes que datan de los siglos XVII, XVIII y XIX. El más antiguo, de hecho, perteneció a Felipe III de España.
Museo de la Marina (Museu de Marinha)
En este museo, localizado en el ala oeste del Monasterio de los Jerónimos y uno de los más visitados de Lisboa, podemos recorrer la historia naval portuguesa a través de mapas, maquetas e instrumentos de navegación como astrolabios, que nos transportarán a la Era de los Descubrimientos.
Museo del Traje (Museu Nacional do Traje)
Inaugurado en los años 70 a raíz de una exposición sobre el traje civil en Portugal, este museo reúne más de 30.000 piezas de vestuario realizadas a lo largo de los siglos. Cuenta también con una exposición permanente dedicada a la evolución de la tecnología y herramientas textiles y un pequeño jardín botánico.
Museo Nacional de Arte Contemporáneo – MNAC (Museu do Chiado)
Referente nacional del arte portugués comprendido entre la segunda mitad del siglo XIX hasta la actualidad. La galería incluye obras de Rodin, Jorge Vieira y Antonio Teixeira; pintura, escultura y fotografía se dan cita en este museo que continúa ampliando su colección permanente, formada por más de 5.000 piezas. El café del jardín nos permitirá hacer una agradable pausa.
Museo Berardo (Museu Colecção Berardo)
Fruto de la colección privada del magnate José Berardo, el museo alberga obras de más de 70 corrientes artísticas de los siglos XIX y XX: Duchamp, Bacon, Pollock, Magritte o Dalí son sólo algunos de los protagonistas de esta colección, considerada una de las más valoradas del mundo en arte contemporáneo. No te pierdas el retrado de Judy Garland de Warhol.
Museo de la Electricidad (Museu da Electricidade)
Calderas, condensadores y todo tipo de maquinaria antigua se han conservado en este museo donde podremos sentirnos como un trabajador de la industria termoeléctrica haciéndonos con los mandos de la sala de control, además de practicar experimentos científicos varios en las salas habilitadas para ello. Un museo ideal para ir en familia y pasar una mañana muy divertida y sobre todo didáctica.
MAAT (Museo de Arte, Arquitectura y Tecnología)
Su edificio es una de las novedades del paisaje lisboeta de los últimos meses, inconfundible con su diseño vanguardista que simula una gran ola cubierta por miles de azulejos blancos que reflejan los tonos del agua del Tajo. Además de albergar un interesante espacio dedicado a exposiciones temporales sobre arte, arquitectura y tecnología, el MAAT de Lisboa constituye un buen mirador desde el que deleitarse con las vistas de la ciudad, especialmente al caer la tarde.